En Baja California se tuvo una excelente experiencia en la pasada movilización nacional del FPR el año pasado y las primeras manifestaciones de combatividad en el noroeste no pronosticaban menos. El 15 y 16 de enero, contingentes de Sonora y Baja California “recibieron” a Vicente Fox con consignas y demandas políticas revolucionarias. Esta Jornada, igual que la anterior, está marcada por el sello de la persecución política de nuestro compañero dirigente, Julio Sandoval Cruz, quien se encuentra preso en el penal de Ensenada, desde hace más de un año. Aunadas a las demandas nacionales se luchó por:

1. ¡Alto a la persecución política de los luchadores sociales! Alto al hostigamiento contra los dirigentes del poblado Maclovio Rojas: Hortensia Hernández, Artemio Osuna y otros. Exigimos la liberación de la compañera Nicolaza Ramos, recluida en el Penal de la Mesa, en Tijuana. Exigimos la absolución inmediata de la dirigente Beatriz Chávez, de San Quintín, quien sigue bajo proceso.

2. ¡Derogación de la fracción tercera del artículo 226 del Código Penal Estatal, que criminaliza la lucha social!

En Baja California, la Jornada inició en Tijuana con una Conferencia de prensa con el anunció del plan de acción para los siguientes días, el mismo día se apoyó una actividad pública del Poblado Maclovio Rojas, por la libertad de sus presos y el derecho a la tierra. El miércoles 26 de febrero se tuvo una entrevista con el Secretario General de Gobierno de Baja California, donde se le expusieron las demandas políticas y las reivindicaciones inmediatas de la movilización en el estado; desde ahí se arrancó una mesa de trabajo para la siguiente semana en Mexicali, capital del estado, donde nos movilizamos. Durante el resto de la semana se realizaron actividades de agitación y propaganda, incluyendo la jornada con los obreros en huelga de Industrias Fronterizas. El sábado 1º de marzo una comisión acudió a la comunidad rural de San José de la Zorra, donde se celebró un Encuentro Indígena Nacional, en el lugar se agitó y se obtuvo apoyo por la libertad del compañero Julio Sandoval, quien es indígena triqui.

A la plataforma reivindicativa general se sumó las siguientes demandas: ¡Regularización de la tierra y alto a los fraudes de los terratenientes y funcionarios! En Pueblo Autónomo “Aguascalientes”, Cañón Buena Vista, en Ensenada; en la Colonia Lagunitas, Tecolote 1, 2 y 3, La Joyita, La Gloria, Maclovio Rojas y Puerta al Futuro, en Tijuana; y todos los predios irregulares. Además de demandar solución de las demandas a favor de la Coalición Pro-Justicia de los obreros de Industrias Fronterizas.

Las movilizaciones iniciaron el domingo 2 de marzo con una concentración en Pueblo Autónomo “Aguascalientes”, de donde se partió a Mexicali; en esta capital se pernoctó y se instaló el plantón en las afueras del edificio del Poder Ejecutivo del Estado. El plantón duró tres días, levantándose hasta recibir respuesta satisfactoria a las demandas planteadas.

De esta manera, terminó la Jornada Nacional de Lucha, más no la movilización. Atentos al cumplimiento de los acuerdos arrancados al gobierno, se ha seguido presionando con la movilización. Así, por ejemplo, el 17 de marzo se realizó un plantón el la Subsecretaría General de Gobierno en Ensenada; 21 de marzo se realizó una combativa marcha Contra la Guerra Imperialista y por la libertad del compañero Julio Sandoval, siendo el FPR quien imprimió el carácter militante y combativo al contingente.

Como balance, podemos decir que esta Jornada ha llevado una mayor planificación, nada se dejó a la espontaneidad; arrancó parte de las demandas reivindicativas que se propuso, avanzó en la solución de las demandas políticas en el estado. Desde la perspectiva organizativa, cualificó el carácter del movimiento y el estilo de trabajo de las organizaciones; además, sirvió para medir el pulso a las organizaciones que integran nuestro FPR y la fusión de unidad de acción con las organizaciones hermanas.

En total, las organizaciones que participaron en esta campaña de lucha fueron: el Comité Zapatista “Tierra y Libertad” y la Colonia Lagunitas (Tijuana), la CIOAC (San Quintín), la Comunidad “Nuevo San Juan Copala” (San Quintín); y por supuesto que el Movimiento Indígena por la Unificación y Lucha Independiente-FPR (Ensenada) y el FPR-Tijuana. Es importante mencionar también que la Jornada tuvo realmente en el estado una presencia en todos los municipios donde tienen presencia el FPR, militantes y amigos.

En resumen, esta jornada fue un triunfo para el FPR. Las banderas rojas de la hoz y el martillo no dejaron ni dejarán de ondear, la plataforma política del FPR se proyectó en todo el estado. La lucha de clases abierta y consciente avanza en Baja California.

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